jueves, 30 de septiembre de 2010

Inspiración.

Me he dado cuenta de que tu ausencia es mi inspiración.

Pero, joder, necesito tu aliento en mi cuello. Necesito tirarme contigo en cualquier sitio, volverme pequeñita y acurrucarme a tu lado, que me abraces y no me sueltes más. Besarte el costado. Tu olor mezclado con mi esencia, penetrando por todos y cada uno de los poros de mi piel. Quiero volver a darte el beso de buenas noches en la cama antes de dormir. Volver a despertarme a tu lado, y que tu risa sea la alarma de mi reloj.

martes, 28 de septiembre de 2010

Me gusta.

Me gusta cuando llego al bar y tu ya estás esperándome mientras te tomas un café. Me gusta cuando te quedas mirándome con esos ojos marrones tan profundos que tienes. Me gusta cuando me abrazas fuerte y parece que me vas a partir en dos. Me encanta sonreír cuando miro el móvil y tengo un mensaje tuyo que no me esperaba. Me gusta poner mi pierna encima de la tuya cuando estamos sentados en algún sitio. Me encanta que me abraces por la espalda agarrándome las manos y no me sueltes. Me gusta cuando me dices que me echas de menos, aunque no sea con esas mismas palabras. Me gusta cuando sin querer me rozas. Me gusta cuando me das "un beso". Pero lo que más me gusta de todo, es que por fin hayas vuelto. Ya no te siento tan lejos.

La máquina de la verdad.

Pensaba y no decía nada, allí parada frente a él. Con todo el miedo del mundo a que al decir una sola palabra todo se disolviese en el aire y no quedase nada más que el recuerdo. Y seguirá esperando a que la extraña conexión por la que él adivina lo que ella piensa haga las veces de máquina de la verdad y le diga que le quiere.

Guao.

Joder, esto es increíble, me levanto cada día con una sonrisa aún más grande que la del anterior.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Turnedo.


Aunque siga suspirando
por algo que no era cierto
me lo dicen en los bares,
es algo que llevas dentro
que no dejas que te quieran,
sólo quieres que te abracen


Lo siento.

Y yo sé que le quiero mil veces más de lo que él me quiere a mí, pero duele tanto cuando me lo confirma... Que a veces hace que me arrepienta de estar enamorada.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

No sé que me quieres decir. Ni siquiera si quieres decirme algo.

Confundo la tierra con el cielo al caminar en dirección al horizonte. Voy en busca de mi destino, pero ha estado lloviendo y el camino ya no está bien marcado, aunque quizás nunca lo estuviese. Ya no sé si seguir andando o parar a descansar y tratar de encontrar el significado de tus ojos cuando se posan sobre los míos. Solo hay una cosa que tengo clara: No voy a marcharme de este mundo sin descubrir su secreto.

lunes, 20 de septiembre de 2010

On a bottle of whisky.

Aún saliendo por la puerta, ya tenía el cigarro en la boca. Lo encendió con un mechero amarillo, uno de los tantos que pasan por sus bolsillos diariamente. Iba a acercarse a uno de aquellos bares de cerca de la universidad, pero según cerró la puerta se dio cuenta de que para ahogar sus penas en un vaso no hacía falta hacer un trayecto tan largo. Bastaba con doblar la esquina, sentarse en la barra y pedir un whisky doble (mejor asegurarse, no vayan a saber nadar y un whisky normal no sea suficiente).

Cuando dejó de poder leer, sacó su teléfono móvil y releyó todos los mensajes recibidos. O eso creía ella, que inventaba a su antojo todas y cada una de las palabras que los remitentes habían tecleado.

viernes, 17 de septiembre de 2010

De miedos y ladrillos.

Y el miedo me recorre el organismo, como una droga inyectada con una aguja sin esterilizar. Y parece que soy imbécil, volviendo a pincharme la mierda en las venas en cuanto sé que el efecto ha pasado.

Deja ya de poner ladrillos en el muro. Soy yo, no voy a hacerte daño.

Me asustas. Y eso nunca me había pasado. Y eso me asusta aún más.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Morir.

Después di un paso en falso, y me enamoré. Fue entonces cuando entendí: el amor está loco. Sacrificó a mi juicio, la causa del dolor. Ahora sólo vivo, la hora aún no llegó.

Reproducirse.

Difundí lo poco que entendí. Que el amor es lo más bello, que es la auténtica libertad. Que muy pocos lo alcanzan, sólo los que lo quieren de verdad. Que es la única manera de llegar a la auténtica felicidad.

Crecer.

Después comencé a curiosear, pero cada vez entiendo aún menos. Ya va siendo hora de que deje de preguntar.

Nacer.

Nací con la cabeza en las nubes y sabiendo correr, pero no frenar. Y cuando ando, lo hago hacia atrás. No, claro que no podía nacer como la gente normal.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Juego.

Sorpresas. Hacer el idiota por la calle, comenzar a pegarnos. En cuanto te vea, correr hacia ti y saltar a tus brazos. Morder y besar, pero sobre todo morder. Desnudarnos enteros y hacernos cosquillas. Aguadillas en el mar. Correr a toda velocidad por las calles de la ciudad, como si una manada de leones nos persiguiese sin frenar. El amor es un juego.

Pero tienes que entender que el juego es el amor, no yo.

Rabia.

La longitud de mis dedos, y los espacios entre ellos, se ajustan a la perfección con tus caderas.

La mirada de tus ojos me intimida. Suaves susurros entre besos. Y mis dientes en tu cuello. ¿Cuánto más voy a aguantar sin morderlo?

Uf.

Es fácil. Te recuerdo sin mirar tus fotos. Y tengo tus ojos grabados a fuego en mi conciencia.

Estoy enamorada de ti, pero creo que la tentación va a consumirme.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Lo siento.

Por más que intento controlarlo, siempre te hago daño. Espero que estés bien.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Ya no eres tú, eres tú solo.

Las nubes siguen cayendo y mi respiración funcionando, pero eso no es malo. Al fin y al cabo, ¿qué importa mi voz? Tan sólo soy una parte muy pequeña de mi misma.

Es como cuando te tumbas encima del edredón y el techo no para de dar vueltas. Pero tu no te mueves ni un sólo centímetro, permaneces absolutamente quieto y callado esperando que la cordura piense que estas muerto y se marche a acompañar a cualquier otro en su trayecto. Y allí te quedas tu, solo con las voces de tu cabeza, que también te abandonan porque allí no se encuentran a gusto. Ya no eres tú. Eres tú solo.

martes, 7 de septiembre de 2010

Recuerdos para inventar.

No hay nadie que te invente mejor que yo. Tengo esos ojos marrones grabados a fuego en mi cabeza, el sabor de tus labios y el olor de tu pecho. Y el tacto de tu cuello... ¿Cómo iba a olvidarlo, si cada vez que lo rozo te lo arrancaría a mordiscos?

domingo, 5 de septiembre de 2010

Libertad y amor.

Cuando amas a una persona, quieres lo mejor para ella. Y te aseguro que no hay nada mejor que la libertad y que el amor. Y, aparte de ser libre, te aseguro que no hay quien te quiera más que yo.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Lo tengo todo y aun así, me falta algo.

Perdí la noción del tiempo, dejé de saber donde estaba mi cuerpo para sentir donde estabas tú. Los sonidos penetraban por mis oídos pero aún así no escuchaba absolutamente nada. Quizás de vez en cuando el suave pero rápido correr de la sangre por mis venas o el ruido de mil pequeñas tuercas desprendiéndose de mi cabeza. La cordura se ha encargado de alimentar a la locura y ya no se si hacer cabriolas o tumbarme en el césped a soñar con la caída del cielo.

No quiero (ni debo) admitirlo, pero este es mi refugio. Y sí, te echo de menos.