A veces dormir me da tanto miedo que no puedo contener las lágrimas en los ojos. Me escondo entre las sábanas teléfono en mano, no vaya a ser que con lo que sueño despierta las pesadillas vengan a atacarme incluso cuando no duermo.
Aun así, insomnio, ¿dónde estás?
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Acabo de leer ahora tu comentario en mi blog... ¡Perdona el retraso! Hacía un mes que no entraba en mi blog, la inspiracion no me venia y lo deje un poco abandonadillo :) Gracias por tu comentario!
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